Inquietud o irritabilidad en un niño: Qué es, causas, síntomas, diagnóstico, tratamiento, prevención
Niño quisquilloso o irritable; inconsolabilidad; Irritabilidad
Un niño quisquilloso o irritable es un patrón de comportamiento, que se puede observar en los niños. Suele tener episodios de tristeza., irritabilidad y frecuentes episodios de llanto o berrinches.
Es importante tener en cuenta, que esta es una condición común entre los niños pequeños y no necesariamente indica un problema grave. La mayoría de los niños superan este comportamiento a la edad de tres años..
Causas de un niño inquieto o irritable
Hay muchas causas potenciales de un niño quisquilloso o irritable.. Algunas posibles razones pueden incluir:
Hambre. Los niños pueden enojarse fácilmente, cuando tengan hambre y no les den de comer, cuando lo esperan.
brotes de crecimiento. Durante los períodos de crecimiento acelerado, los niños pueden estar muy inquietos debido a los cambios en sus cuerpos..
La falta de sueño. La falta de sueño puede provocar una mayor irritabilidad e irritabilidad en los niños durante el día..
Hiperestimulación. Demasiada estimulación sensorial puede hacer que los niños se sientan abrumados y frustrados.
Enfermedad: Si el niño no se siente bien, puede expresarlo con irritabilidad e irritabilidad.
Dolor. Los niños pueden experimentar dolor y no ser capaces de expresarlo mejor, que irritabilidad.
Estrés. Vivir en un ambiente estresante puede hacer que los niños reaccionen con emoción.
En desarrollo. Algunos niños pueden desarrollarse más lentamente, que sus pares, y puede mostrar irritabilidad o irritabilidad debido a sentirse abandonado.
Síntomas de un niño inquieto o irritable
El principal síntoma de un niño inquieto o irritable son los frecuentes episodios de llanto., irritabilidad y/o berrinches. Estos comportamientos pueden durar desde minutos hasta horas y pueden variar en intensidad y frecuencia dependiendo de la causa..
Otros síntomas asociados pueden incluir:
- Ansiedad
- Agresión
- Falta de respuesta a los intentos de los padres de consolar
- Dificultades con la alimentación
- Comportamiento obsesivo
Cuándo ver a un médico
Si el síntoma persiste después de los tres años de edad, Hable con su médico. Esto es especialmente cierto, si tal comportamiento va acompañado de otros síntomas alarmantes, como disminución del apetito, trastornos del sueño, pérdida de peso inexplicable, negativa a comer, falta de interés en los juegos de azar o cambios de humor extremos.
Además, los padres deben ver a un médico, si el comportamiento se vuelve serio, frecuentes o continúa durante un largo período de tiempo. En este caso es posible, que el niño sufre de una condición más grave, como depresión o ansiedad.
Preguntas, que su médico puede preguntar
En consulta con un profesional de la salud, a los padres se les pueden hacer las siguientes preguntas::
- Cuando apareció irritabilidad o irritabilidad?
- ¿Con qué frecuencia su hijo exhibe este comportamiento??
- ¿Qué cambios ha notado en su hijo en las últimas semanas??
- ¿Exhiben otros miembros de la familia un comportamiento similar??
- ¿Responde su hijo a sus intentos de consolarlo??
- ¿Ha tenido su hijo alguna enfermedad reciente o cambios en la rutina diaria??
Diagnóstico de un niño inquieto o irritable
Para diagnosticar la causa de un niño inquieto o irritable, un profesional médico puede realizar un examen físico y ordenar varias pruebas. Dependiendo de la edad del niño, el médico puede solicitar una historia clínica completa., incluyendo hitos de desarrollo, cualquier historial familiar de enfermedad y cualquier exposición a toxinas. Se pueden ordenar análisis de sangre para detectar trastornos metabólicos o endocrinos..
Tratamiento de un niño inquieto o irritable
tipo de tratamiento, recomendado por su médico, dependerá de la causa de la irritabilidad o irritabilidad. En algunos casos, el comportamiento puede ser completamente rechazado., y el padre solo recomendará esperar, hasta que el bebé lo supere.
Más a menudo, el médico sugiere cambios en el estilo de vida y atención adicional., para reducir la gravedad de los síntomas. Se pueden recomendar las siguientes opciones de tratamiento:
- Cambios en la dieta. En casos, cuando la causa está relacionada con la dieta de la madre durante el embarazo o la dieta actual del niño, se pueden recomendar cambios en la dieta. Esto puede incluir cambiar a una dieta sin lactosa o sin gluten o cambiar a una fórmula., especialmente diseñado para niños, enfermos de cólicos.
- Suplementos de hierbas. Los remedios herbarios, como té de manzanilla o suplementos de hinojo, se puede ofrecer, si se consideran seguros y apropiados para el niño.
- Medicamentos. En algunos casos, el médico puede recomendar medicamentos, prescripción, como antidepresivos o ansiolíticos. Este suele ser el último recurso..
- Consejería familiar. Si la causa del niño inquieto o irritable está relacionada con el estrés, se puede recomendar asesoramiento familiar, para promover una mejor comunicación y comprensión entre los miembros de la familia.
Tratamiento en el hogar para un niño inquieto o irritable
Además de las terapias, listados arriba, los padres también pueden tomar medidas en casa, para reducir la irritabilidad o irritabilidad, mostrado por su hijo.
1. Establece una rutina diaria
Tener un horario y una rutina constantes puede ayudar a aliviar el estrés y la ansiedad., que puede conducir al empeoramiento de los síntomas. También le da al niño una sensación de consistencia y seguridad., que puede ser relajante.
2. Limitar la estimulación
Los niños pueden cansarse y sobreexcitarse fácilmente. Limitación de estímulos, como ruidos fuertes, luces brillantes y olores fuertes, puede ayudar a reducir el estrés, asociado con estos desencadenantes.
3. Actividades relajantes
Las actividades relajantes pueden ayudar a calmar a un niño inquieto o irritable., como escuchar música, Leer juntos o tomar un baño relajante.
4. Descartar enfermedad
Si el niño no se siente bien, puede causar nerviosismo e irritabilidad. Ponerse en contacto con un médico, para descartar un problema médico, es un paso importante para reducir los síntomas.
5. Haz que tu hijo se sienta cómodo
Consolar a un niño en forma de abrazos., las palabras amables pueden ayudar a reducir la ansiedad y el estrés de un niño. También es importante darles suficiente tiempo, para procesar tus emociones y expresarte.
Prevención de la inquietud o irritabilidad en un niño
En vista de, que la irritabilidad o irritabilidad en los niños es un comportamiento muy común y normal, no se puede prevenir por completo. No obstante, hay medidas, lo que los padres pueden hacer, para reducir la probabilidad de que.
1. sueño de calidad
Garantizar que los niños duerman lo suficiente es una de las medidas preventivas más importantes. Los niños deben dormir 12-16 horas cada noche, de acuerdo a su edad.
2. Nutrición adecuada
Dieta Nutritiva, rico en proteínas, vitaminas y minerales, puede promover un crecimiento y desarrollo óptimos y ayudar a evitar ciertas deficiencias de nutrientes, que puede causar nerviosismo e irritabilidad.
3. Reducir los niveles de estrés
El estrés familiar puede ser un factor importante, causando irritabilidad e irritabilidad en los niños. Minimizar las situaciones estresantes y fomentar un ambiente tranquilo y pacífico puede ayudar a reducir este síntoma..
4. Necesidad de limitar el tiempo de pantalla
El tiempo de pantalla excesivo puede ser demasiado estimulante para un niño, haciéndolo quisquilloso e irritable. Limite el tiempo de pantalla a 1-2 horas al día puede ayudar a reducir este síntoma.
5. Evita la sobreestimulación
Demasiada estimulación puede ser una de las principales causas de nerviosismo o irritabilidad en los niños.. Así, es importante estar atento a las señales de advertencia y evitar acciones o condiciones, que puede ser demasiado estimulante para el niño.
Fuentes y literatura utilizadas
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