La vaginosis bacteriana – Bacterias vaginales sobrecrecimiento
Descripción disbiosis vaginal
La vaginosis bacteriana no es peligrosa enfermedad de la vagina. Aunque la vaginosis bacteriana se trata generalmente con facilidad, puede ser un signo de tener una enfermedad grave. También puede llevar a las siguientes complicaciones:
- Las complicaciones del embarazo, como el bajo peso al nacer y parto prematuro;
- Alto riesgo de enfermedad inflamatoria pélvica, si las bacterias infectan los tubos de Falopio y el útero.
Existe una asociación entre la vaginosis bacteriana y un mayor riesgo de contraer el VIH y otras enfermedades de transmisión sexual. Si una mujer con VIH, y la vaginosis bacteriana, hay un mayor riesgo de transmitir el VIH a su pareja, hombres durante las relaciones sexuales sin protección.
Para el tratamiento de enfermedades antibióticos utilizados.

Las causas de la vaginosis bacteriana
La vaginosis bacteriana se produce, Cuando la vagina se altera el equilibrio normal de las bacterias. Generalmente, Viven en las bacterias beneficiosas de la vagina (Lactobacilos), así como bacterias dañinas (anaerobios – bacterias, que no requieren oxígeno).
A veces las bacterias dañinas se multiplican en gran medida y no proporcionan las bacterias beneficiosas para crecer. La razón de esto es mal interpretado. En algunos casos proliferación excesiva puede estar asociada con la actividad sexual mediante la transferencia de bacterias dañinas de una pareja sexual.
Factores de riesgo
Los siguientes factores aumentan la probabilidad de desarrollar vaginosis bacteriana:
- De fumar;
- El uso de aerosoles o perfume femenino;
- Sexo sin condón;
- El cambio constante de parejas sexuales o múltiples parejas;
- El uso de un dispositivo intrauterino (Marina) para prevenir el embarazo.
Los síntomas de la vaginosis bacteriana
Algunas mujeres con vaginosis bacteriana no tienen síntomas. Otras experimentan los siguientes síntomas:
- Flujo vaginal anormal:
- Color: Blanco o gris;
- Consistencia: delgado;
- El olor a pescado, especialmente después del sexo;
- Sensación de ardor al orinar;
- Comezón alrededor de la vagina;
- Irritación vaginal;
- Dolor durante las relaciones sexuales.
La presencia de estos síntomas no siempre indica la presencia de vaginosis bacteriana, y puede ser causada por otros trastornos. Cuando ocurren, busque atención médica.
El diagnóstico de la vaginosis bacteriana
El médico pregunta acerca de los síntomas y antecedentes clínicos, y le realizará un examen físico.
Los ensayos pueden incluir:
- El examen pélvico para buscar señales de vaginosis bacteriana;
- La selección de la muestra de líquido de la vagina para detectar si existen signos de infección.
El tratamiento de la vaginosis bacteriana
El tratamiento de la vaginosis bacteriana es importante en la presencia de síntomas, y durante el embarazo, incluso si no se observan síntomas. La vaginosis bacteriana se trata fácilmente con antibióticos y medicamentos antiparasitarios, en la forma de comprimidos o cremas vaginales, prescrito por un médico.
Prevención de la vaginosis bacteriana
Para reducir la probabilidad de desarrollar vaginosis bacteriana, usted necesita tomar las siguientes medidas:
- Abstenerse de tener relaciones sexuales o permanecer monógamos (tener sólo una pareja sexual);
- Use un condón durante las relaciones sexuales;
- No usar perfumes o aerosoles femeninos;
- Consulte a su médico para exámenes ginecológicos regulares;
- Para evitar una repetición de la vaginosis bacteriana que pasar todo el curso del tratamiento, aunque los síntomas desaparezcan;
- Es necesario lavar el diafragma reutilizable, u otro dispositivo para prevenir el embarazo;
- Debemos tratar de no usar pantimedias y otras prendas de vestir, que pueden atrapar la humedad en la vagina;
- Después de defecar ano deben limpiarse de adelante hacia atrás (de la vagina).